Caracas, 12 Abr. Cortesía AVN.- Este martes 12 de abril, en un acto celebrado en el Palacio de Miraflores, en Caracas, el presidente de la República, Nicolás Maduro, instaló la Comisión para la Verdad, la Justicia y la Reparación de las Víctimas, una instancia creada para reconocer, proteger y brindar atención a personas afectadas por hechos violentos cometidos en el país, y avanzar en la investigación de estos casos como un método para hacer justicia y alcanzar la paz.
En transmisión conjunta de radio y televisión, el Presidente señaló que esta comisión, contrario a la ley de la derecha que promueve la impunidad, es un instrumento que enarbola el respeto y la paz.
«Hemos venido hoy a activar la ruta de la Comisión por la Verdad y la Justicia, que es un proyecto que en varios momentos se ha enarbolado como instrumento para buscar los caminos del respeto al derecho, a la vida, a la democracia y a los caminos de la paz», declaró el Jefe del Estado venezolano.
La comisión, que será presidida por el vicepresidente ejecutivo de la República, Aristóbulo Istúriz, surge en respuesta a la llamada Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional, aprobada el pasado 29 de marzo por las fracciones de derecha en la Asamblea Nacional (AN) para perdonar delitos de lesa humanidad cometidos desde 1999 hasta la actualidad, incluyendo aquellos que fueran ejecutados durante los hechos del golpe de Estado de 2002 o el intento de derrocamiento al presidente Nicolás Maduro en 2014, que dejó un saldo de 43 personas asesinadas y más de 800 heridos.
Ante este escenario, el Presidente destacó que la Revolución Bolivariana es el principal instrumento que garantiza el porvenir de la patria, así como la Constitución Bolivariana es garantía de paz.
La Carta Magna «es el gran pacto de paz» en la que se configuró «una nueva estructura social, de poder, de nuevo país, un modelo de sociedad democrática», dijo el Mandatario nacional, al tiempo en que llamó a todos los venezolanos a «abrazarla, a defenderla y a amarla» frente a las pretensiones de la derecha de quebrantar su mandato.
¿Quiénes la integran?
Junto a Aristóbulo Istúriz estará el Secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Derechos Humanos, Larry Davoe, quien actuará como Secretario Ejecutivo Permanente.
También se sumarán la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz; el defensor del pueblo, Tareck William Saab; el constitucionalista, Hernán Escarrá; la canciller de la República, Delcy Rodríguez; y miembros del Comité de víctimas de las guarimba y la Asociación de Víctimas del Golpe de Estado del 11 de abril de 2002.
Reconocer a las víctimas y hacer que su testimonio sea escuchado en diferentes destinos del mundo, es una de las primeras tareas que realizará la comisión, informó el vicepresidente Ejecutivo.
«Lo importante es visibilizar a las víctimas, precisar el alcance de los daños y escucharlos, y que el país y el mundo los escuche. Tenemos que colocarles a las víctimas una suerte de micrófono, para que sean oídos y luego los victimarios ser capaces, por la patria y por la paz, de asumir las responsabilidades», expresó Istúriz durante el acto de instalación, transmitido en cadena nacional.
Istúriz presidirá esta instancia, cuyo objetivo principal será reivindicar la justicia y la memoria, como la base ideal para hallar la conciliación y la paz.
«No podemos buscar el perdón sin oír a las víctimas, sin incorporar a las víctimas. Esa es una de las tareas de esta comisión, porque solo así podremos llegar al ansiado objetivo de lograr la verdad, y con la verdad es que puede llegar la justicia, y con la justicia es que puede venir el perdón», señaló el vicepresidente.
La genuina democracia
El periodista venezolano y defensor de los derechos humanos, José Vicente Rangel, expresó un discurso durante el acto, en el se refirió a la importancia de transformar esta comisión en una herramienta para reivindicar la justicia y la memoria.
«Es deber nuestro, de lo que nosotros representamos, reivindicar la justicia y la memoria. No es posible avanzar en el camino de conquistar la justicia y esclarecer la verdad si no hay memoria. La memoria es la base de todo proceso encaminado a discernir dónde está la verdad y dónde está la mentira», expresó el periodista desde el palacio presidencial.
Insistió en que en Venezuela, pese a la guerra económica y mediática que se impone contra el país desde el exterior, existe una inmensa diferencia entre la falsa democracia representativa que imperó durante 40 años de Cuarta República, y la democracia participativa y protagónica que instauró el comandante Hugo Chávez, en 1999.
De aquellos 40 años —explicó Rangel— quedaron altos índices de pobreza y miseria más la muerte de 3.000 hombres y mujeres que padecieron víctima de la represión. Del proceso bolivariano y chavista que asciende a 17 años, quedan las conquistas sociales ganadas por el pueblo, la organización popular y la esperanza de consolidar la patria nueva.
«Para nosotros es fundamental que quede claro frente el mundo que Venezuela es una genuina democracia, y que se respetan los derechos humanos. Que en Venezuela funcionan las instituciones y que tenemos una fuerza armada respetuosa de los derechos humanos», dijo.