Charla dictada en Espromed Bio para prevenir enfermedades
Caracas, 04.10.17 (Prensa Espromed Bio).- La importancia del lavado de manos para la prevención de enfermedades fue el tema del 8º Encuentro con la Salud, Ciencia y Tecnología promovido por la Empresa Socialista para la Producción de Medicamentos Biológicos (Espromed Bio), C.A., ente del Ministerio del Poder Popular para la Salud.
Anticipándose al Día Mundial del Lavado de Manos que se celebrará el próximo 15 de octubre, Espromed Bio -en consonancia con el argumento de la Organización Mundial de la Salud en tanto que la higiene de las manos en el momento adecuado salva vidas- promueve entre sus trabajadores una campaña para concienciarlos al respecto, habida cuenta que se trata de una empresa productora de vacunas y medicamentos y que por ende las medidas antisépticas son fundamentales.
Mery Faría, líder del área de Producción de Toxoide Tetánico, fue la responsable de la charla “Lavarse las manos: Una pequeña acción, una gran diferencia” con la que se paseó por aspectos históricos como los aportes del bacteriólogo francés Louis Pasteur a la microbiología y la técnica del lavado de manos desarrollada por el obstetra húngaro Ignaz Semmelweis; también las manos como foco de contaminación y la proliferación de los microbios.
Precursores de la asepsia
Faría hizo hincapié en que pese a saber que debemos lavarnos las manos, desconocemos cómo hacerlo adecuadamente, el por qué o de dónde surgió esa técnica que suele tomarse como algo trivial pero que en su momento fue algo muy novedoso.
Relató que la técnica del lavado de manos fue introducida por primera vez en el siglo XIX por el Semmelweis, conocido como “salvador de las madres”, quien con sólo aplicar el lavado de manos redujo de más de 10 por ciento a menos de 2 por ciento las muertes post-parto a causa de fiebre puerperal, infección causada por bacterias. Sin embargo, la comunidad médica de entonces rechazó su teoría y no fue sino hasta 30 años más tarde que se comenzaron a aplicar las medidas de asepsia (higiénicas).
Paralelamente, Pasteur desarrolló importantes estudios que demostraron la relación entre las enfermedades y los microbios, cuya existencia se desconocía en esa época, aun cuando pululaban por todas partes.
La ponente destacó la innumerable cantidad de microbios o agentes patógenos presentes en todo lo que está a nuestro alrededor y, por supuesto, las manos; de allí que sean fuente de contaminación.
¿Cómo lavarse las manos?
El proceso debe durar entre 40 a 60 segundos comenzando por mojarse las manos, aplicar jabón, frotarlas, restregarlas, enjuagarlas y secar preferiblemente con toallas de papel o secador, debido a que las de tela retienen humedad y ésta es un caldo de cultivo para los microbios. Faría agregó otro paso que es la aplicación de alcohol antiséptico.
Entre las enfermedades prevenibles con el lavado de manos mencionó la hepatitis, salmonelosis (afección diarreica transmitida por la bacteria salmonella), gastroenteritis por rotavirus, cólera, gastritis, diarrea hemorrágica y la gripe.
“Estos son temas que si bien son sencillos son de gran impacto en la comunidad, en nuestra vida y en nuestro trabajo. Sin embargo, por ser Espromed una planta de medicamentos biológicos que por lo general van al cuerpo por vía inyectable, tenemos que tratar de elaborarlos con las medidas de asepsia que mejor podamos aplicar. ¿Y qué mejor medida de asepsia que comenzar con el lavado de manos?, en vista de que con las manos recogemos cualquier cantidad de patógenos por donde nos movemos”.
Acentuó que el propósito de esta actividad es crear conciencia en el personal que si aspira producir medicamentos que además de eficaces sean seguros e inocuos, debe empezar por las medidas más sencillas y rutinarias y una de ellas es el lavado de manos. “Después del lavado de manos aplicar las medidas propias de una planta de producción farmacéutica y tomar conciencia de todo eso, que no son actos disgregados sino que deben ejecutarse de forma conjunta para lograr un objetivo único”.